El primer día de febrero, tras varias dudas y polémicas, comenzaron a funcionar las cámaras que hacen fotomultas sobre lo que ocurre en el interior de los vehículos. De las 215 cámaras distribuidas en las calles porteñas, 100 tienen la tecnología necesaria para registrar situaciones que van más allá de faltas como el exceso de velocidad, el mal estacionamiento o pasar semáforos en rojo.
A siete meses de la puesta en marcha, ahora se conocieron las primeras conclusiones. Así, entre enero y agosto se hicieron 1.819.617 actas. El 71.8%, 1.305.719, fueron electrónicas, mientras que el 28.2% restante, es decir, 513.898, manuales. Los números representan un 18% más respecto de las cifras registradas durante el mismo período del año pasado (1.543.646).
En cuanto a los nuevos controles, las dos infracciones que tienen que ver con conductas en el interior del vehículo ocuparon los puestos 5 y 6 en el top 10. Por usar el teléfono móvil fueron infraccionados 52.672 conductores, el 2.9% del total. Mientras que los que recibieron una multa por no ponerse el cinturón de seguridad fueron 45.864, que equivale al 2.5%.
Por usar el celular, en el mismo lapso de tiempo, el año pasado se hicieron 47.031 infracciones, con lo que la variación no es grande. Por el contrario, sí se percibe una diferencia importante en cuanto a las multas por no ponerse el cinturón: en 2022 fueron 7.257.
Según fuentes de la Secretaría de Transporte y Obras porteña, tiene que ver con que «hay menos chances de registrar o fotografiar a un conductor con el celular en sus manos, mientras que si la persona que conduce no se coloca el cinturón en todo el trayecto hay más posiblidades de registrarlo».
«Lo que está prohibido es tomar el teléfono con las manos», aclararon las fuentes oficiales cuando se anunció la puesta en marcha de las cámaras y hubo dudas y polémicas. Y explicaron que si en la foto además se ve al conductor hablando o mandando mensajes, no hay dudas de la infracción. Lo que puede hacer el conductor es consultar el recorrido que tiene que hacer mediante una app o hablar utilizando el sistema de manos libres, «siempre y cuando el celular esté colocado en un soporte».
Respecto de la polémica por violación de la privacidad, así como lo habían hecho en febrero, cuando surgieron las dudas y las críticas, ahora reafirmaron que sólo se procesan multas a conductores a los «que no se les pueda divisar la cara y, si hubiera un acompañante, se tapará en su totalidad. Además, quedarán registradas sólo las matrículas de aquellos vehículos que se consideren infractores».
Por eso, si la cámara detecta a un automovilista que sostiene un mate o una botella en sus manos, aunque la recomendación del Código de Tránsito es que los conductores deben tener la mayor parte del tiempo las dos manos sobre el volante, son acciones que no están tipificadas como infracción. Algo parecido ocurre con quienes fuman. Usar una de las manos para sostener un cigarrillo no está tipificado como infracción.
Según habían explicado fuentes del Gobierno porteño, puede ocurrir que el software con el que funcionan las cámaras detecte la irregularidad. Pero ahí se activa el segundo método de chequeo, que lleva a cabo un agente de tránsito que analiza la imagen y, en estos casos, las descarta por no existir infracción.
El top 10
En cuanto a las infracciones generales, es decir, las que pueden ser registradas por cámaras o por agentes, el exceso de velocidad sigue siendo la que encabeza el ranking y representa el 43.3% del total. El costo depende del tipo de arteria y los kilómetros por hora en los que se supere la máxima permitida, por lo que el sanción puede oscilar entre $ 10.266.20, la más común, por no respetar la mínima; y $ 586.640, la más grave, por ir a más de 140 km/h.
El segundo lugar es para el estacionamiento indebido, que fue el 24.3% de las infracciones. El valor de la multa arranca en $ 14.666 y puede ascender a $ 43.998 si es por estacionar en rampas para personas con discapacidad. El 6.3% de las infracciones fueron por violar el semáforo rojo (de $ 43.998 a $ 219.990). Mientras que el 4% se labró por invasión de carriles exclusivos ($ 21.999).
La infracción por usar el teléfono oscila entre $ 14.666 y $ 29.332, mientras que la multa por no colocarse el cinturón de seguridad cuesta $14.666.
La séptima infracción del top 10 es la falta de placa de dominio o taparla. El costo es de $ 146.660; mientras que circular con placas de otro vehículo está penado con $ 175.992. El giro prohibido tiene una sanción de $14.666 y la invasión de ciclovías de $ 21.999. El puesto 10 es para quienes no tienen la VTV al día. Son penados con $ 58.664.
La unidad que se utiliza para establecer el costo de las infracciones son las Unidades Fijas. Se modifican en forma semestral de acuerdo al precio promedio medido en la Ciudad de medio litro de la nafta de mayor octanaje. La última actualización, que estará vigente hasta marzo de 2024, se hizo efectiva el lunes.